Nacido a raíz de la necesidad de cumplir con los requisitos de un vehículo robusto y todoterreno, el Jeep Willys cumple 80 años.
Creado para uso militar en la Segunda Guerra Mundial por Estados Unidos, se puede decir que es uno de los únicos vehículos que se pueden reconocer con sólo mirarlo.
El nombre Jeep tiene varias versiones sobre su origen, mientras que Willys viene de su fabricante, Overland-Willys.
Para hacer frente a la potencia nazi de Hitler, los americanos decidieron fabricar un vehículo que sea tan potente como su flota de aviones y tanques de guerra.
El país germano por su parte decidió apostar por su reconocida marca Volkswagen para fabricar su vehículo estrella para la guerra.
Luego de varias modificaciones, el mismo se transformó en lo que sería el vehículo del pueblo, el conocido Volkswagen Beetle, conocido también como escarabajo.
En Estados Unidos mandaron a hacer prototipos de vehículos, y marcas como Ford, Bantam y Overland-Willys decidieron presentar sus ideas.
El ejército necesitaba algo que sea duradero, robusto y que pueda circular por terrenos con muchas dificultades.
El vehículo tendría que ser polivalente, con velocidad suficiente para trasladarse rápido y que pueda cargar o trasladar artefactos de guerra como carros o cañones.
Así nació el Jeep Willys, un vehículo ágil y ligero de peso, fiable y con un diseño que quedó para la historia.
Fabricado con elementos que consideraron sólo esenciales, su peso de poco más de 1110 kilos permitía que tenga una velocidad final de más de cien kilómetros por hora.
Si bien hoy esa velocidad no es gran cosa, para el año 1940 era toda una proeza que los americanos pudieron aprovechar.
Diseño, motor y accesorios que marcaron un antes y un después
Cuando comenzaron su fabricación, pensaron que añadiendo ciertos accesorios al Jeep Willys, los mismos iban a ayudar en el campo de batalla.
Así le colocaron tanto a los costados como en la parte trasera, palas y herramientas, la clásica rueda de auxilio y bidones de metal para trasportar líquido.
También estaba el modelo que tenía la capacidad de cargar armas en su carrocería, teniendo una estructura entre medio de los asientos delanteros para colocar una ametralladora.
En cuanto a su motor, el Jeep Willys tenía una mecánica longitudinal de 4 cilindros en línea, 60 caballos de potencia y 2.199 centímetros cúbicos.
Además de todo eso que era un gran adelanto para la época, este todoterreno tenía tracción 4×4, lo que le permitía transitar por terrenos poco firmes.
Inicialmente se fabricaron un total de 16 mil unidades cuyo propósito era su utilización en la Segunda Guerra Mundial.
A partir del éxito que tuvo para su propósito inicial, en los años posteriores este vehículo comenzó a fabricarse en serie.
Para acomodarlo a las necesidades más «urbanas» algunos aspectos de su estética fueron cambiando.
Una de las características que fueron modificadas fueron sus luces delanteras, las cuales inicialmente estaban encima de los guardabarros delanteros.
En los modelos siguientes las mismas se cambiaron y se colocaron en la parte delantera formando un conjunto con la parrilla de 9 ranuras.
El Jeep Willys cumple 80 años con varios modelos adaptados a la modernidad de la época
Con el correr de los años aparecerían diferentes modelos como el Jeep Willys Wagon, considerado como uno de los primeros SUV de la historia.
El mismo continuaba siendo 4×4, y una de sus novedades era la capacidad que tenían, que se aumentaba a 7 plazas.
Este último modelo abriría la puerta a los famosos Jeep del modelo Cherokee, fabricados a partir del año 1974.
Mientras aparecían todos estos modelos el Jeep fue transformando su estética, apareciendo la capota para el caso de los Jeep Willys.
Luego se fabricarían modelos completamente cerrados más similares a lo que hoy se conocen como camionetas, más completas y más resistentes.
Lo cierto es que a partir de la aparición del Jeep Willys la marca fue adaptándose llegando a hacer de Jeep un modelo conocido en todo el planeta.
Hoy en día hay muchos coleccionistas que intentan mantener los primeros modelos originales, el clásico Jeep color verde oscuro que tan atractivo es.
Si bien son pocos, aún existen alrededor de 30 unidades originales del Jeep Willys tal como salió por primera vez.
Los coleccionistas intentan mantenerlos y cuidarlos ya que es muy complicado conseguir piezas de recambio originales.
Aún así se las rebuscan para conseguirlas para mantener viva la gran genialidad que fue construida por primera vez hace ya 80 años.
Sin dudas, el Jeep Willys cumple 80 años y es una joya que muchos desean tener para salir a pasear, ya sea por la ciudad o por cualquier playa.